Create your own banner at mybannermaker.com!

viernes, 24 de julio de 2015

Fuimos Serendipia.

Fuimos un apasionante verso breve.
Intensos como la tormenta y calmados como el ojo de un huracán. 
Cruzábamos miradas furtivas desafiando al deseo, mientras recorríamos nuestros cuerpos con los ojos, como si de tesoros se tratasen. 
Soñamos mucho. Yo contigo y tú conmigo. Mientras la luna nos unía en sueños, habitábamos diferentes camas. La mía tan grande y vacía. La tuya tan llena de ti.  De tu aroma. 
Envidiaba,  y todavía lo hago,  a tus sábanas por sentir tu piel.  Esa piel que no fue mía,  pero quiso entregarse a mi. 

Y aún recuerdo tus besos,  después de tanto tiempo,  o quizás no tanto en realidad.  Mataría mil hombres por morderte los labios y lamer tu cuello.  Sin dudarlo lo haría.  Y perderme contigo en cualquier lugar del mundo. El sitio no importa,  solo ansío tu presencia.  A ti.  Tan lleno de vida y de sueños.  Tan perfecto. Tan niño y hombre.

Yo buscando ser libre y apareciste de la nada, cual sirena que guía a un marinero de madrugada. Yo con el corazón roto y tú con cajas de tiritas, pegando cada trozo.

Porque al final del cuento,  sí que eras mi Serendipia, aunque no supe entenderlo.

Maldito veintinueve.

4 comentarios:

  1. 💕eres todo corazón... Me encanta leer tus notas,💕

    ResponderEliminar
  2. Si supiste entenderlo... Solo que a destiempo. Pero nunca es tarde princesa..... Nunca es tarde.

    ResponderEliminar
  3. Ojala no lo fuera, pero supongo que ya ese tiempo pasó :)

    ResponderEliminar